jueves, 25 de marzo de 2010

NO ES LO MISMO


Cada día que pasa me doy cuenta lo diferentes que son las carreras de los entrenamientos, hay gente que en los éntrenos anda muchísimo e incluso mas que mucha gente que compite todos los fines de semana, es por ejemplo mi caso. En los entrenamientos suelo ir bastante bien pero el problema reside en las carreras. Hay gente que en los éntrenos es de una manera y se le suele sacar de punto fácil, pero cuando corren carreras acaban siempre en cabeza haciendo una carrera magnifica y yo sin embargo, o quedo descolgado o fuera de combate en alguna caída. Yo siempre tengo un dicho que no es lo mismo los entrenamientos que las carreras y así es.

Hoy, entrenando por mi zona y a ritmo tranquilo, me han cogido un numeroso grupo de corredores donde iban algún veterano,ciclosport y algún otro corredor.Iban fuertes pero lo que mas me ha sorprendido han sido las maneras.Parecía que les faltaba el dorsal ya que mientras alguno se quedaba, los que tiraban miraban atrás para ver quien era el que se quedaba.Al llegar a coronar un repecho,se atacaban para coronar los primeros y se lanzaban en un descenso peor que el de carrera.
A mi me han sacado de punto y me las veía gordas para no quedarme.Mientras iba con ellos me preguntaba que todos estos podían correr de amateurs, que había carreras que a ese ritmo las hubiesen ganado.A sido increíble.

Pues va a ser que no.No es lo mismo correr que entrenar.En un entreno sales sin presión, paras cuando quieres y solo vale tu ritmo. Es mi caso yo puedo ser un portento físico en los entrenamientos, para ser de los mejores pero me falla algo, las carreras!!!.

Hay que tener un pequeño don, ese que solo tienen los que corren,ese que un ciclista sin haber corrido nada se puede equiparar con otros que llevan corriendo mas carreras.

Es un don que va más allá de la fuerza,EL DE LA CABEZA!!!.

Allí reside todo.

miércoles, 24 de marzo de 2010

LA VIDA DEL EQUIPO MILAGRO 2010


Un ciclista vestido de amarillo asoma por el hall del hotel. Es Óscar Pereiro, ganador del Tour de 2006, y co-équipier de Alberto Contador en este Astaná de capital kazajo, que en noviembre de 2009 era un imposible y que en esta primavera luce mejor cara. "Aquí lo que diga Alberto va a misa", apunta el gallego.
El equipo-milagro viste ropa de calle de marca (Aeronautica Militare), maillots de Nalini y bicicletas Specialized. La tropa está esperando la nueva cabra de contrarreloj (ya homologada por la UCI tras los retoques en el tubo oblicuo del cuadro que va del eje del pedalier al manillar), que ya sí tienen Contador y Vinokourov, líder del otro Astaná. "Si Contador está aquí es por Vino", dice Óscar.
Pereiro y sus compañeros preparan la etapa de la Volta a Catalunya en un viejo autobús. El del año pasado era otro, de Johan Bruyneel, que se llevó todos los contratos para el RadioShack de Armstrong. Eran suyos: el camión, el acuerdo con la ropa, las bicis Trek se fueron con Lance... En un tiempo récord, los responsables del Astaná han tenido que encargar un camión para las bicicletas y los mecánicos, un autobús nuevo, alquilar otro... "Nos tratan como generales". Ya no van en Volvo sino en Renault. "Sabemos que quizá falta algún corredor de calidad para completar, pero los que estamos sabemos a lo que hemos venido. Queremos ganar el Tour con él". Y Óscar espera estar ahí. "No fallaré. Ahí estarán Alberto y ocho más".
Pereiro se declara "sorprendido" por haber encontrado en él a un "campeón que agradece mucho el esfuerzo de los compañeros, serio y centrado en carrera".

martes, 23 de marzo de 2010

LA INCERTIDUMBRE DEL CASO VALVERDE


Después de leer con detenimiento el fallo del TAS, el que corresponde a la vista de enero pasado, el que juzgaba el recurso interpuesto por Alejandro Valverde contra la sanción del CONI, un organismo al que consideraba 'no competente' para sancionar a un deportista no italiano ni federado en Italia, soy de la opinión de que el ciclista murciano tiene muy difícil salir vivo de este proceso, aunque sigo sin estar convencido de su culpabilidad, como tampoco de su inocencia, si bien mientras no se demuestra lo contrario estimo que debería prevalecer esta última.Digo esto porque entre tanto juicio, tantos abogados, tantos testigos, tantas pruebas y tantas leyes (españolas, italianas, suizas...) y reglamentos (WADA y UCI) a interpretar y tener en cuenta, parece que todos se han olvidado de lo principal: determinar con exactitud, sin lugar a dudas, si la bolsa 18 de la Operación Puerto pertenece o no a Valverde. Los italianos dicen que sí; los españoles, que no. ¿Tanto costaría hacer una nueva prueba de ADN, en un laboratorio neutral y con la presencia de todas las partes, para que de una vez por todas se conozca la verdad? Porque si es su sangre -plasma, mejor dicho-, una sanción sería más que lógica, pero si, como afirma el murciano, no lo es, alguien debería pagar por el calvario por el que está pasando el ciclista español en los últimos años.¿Por qué hay que creerse la versión del CONI si la prueba de ADN la hicieron sin las más mínimas garantías? Porque, cuando está en juego el futuro de una persona, hacer una prueba de este tipo sin su presencia, o la de sus técnicos, no parece lo más justo. Cualquier control antidopaje contempla la presencia del deportista, cuando el ADN es algo mucho más serio. ¿Por qué, igualmente, tenemos que creer la versión de Valverde si, como es obvio, se está jugando su carrera y puede que no diga la verdad? Lo dicho: la prueba del ADN es la que puede dar o quitar razones y, sin embargo, no se ha hecho, algo que, lejos del ámbito jurídico en el que se mueve el TAS, no entienden los aficionados ni la opinión pública en general.Lo curioso del caso es que Valverde no se niega a hacer la prueba del ADN, que suele ser lo más normal, sino más bien todo lo contrario. En 2007, de hecho, firmó la 'Carta por un Nuevo Ciclismo' que exigía la UCI, y que contemplaba esta posibilidad; y más recientemente, durante el juicio de enero ante el TAS, también se ofreció a someterse a la 'prueba del algodón' siempre y cuando se hiciera en un laboratorio neutral, por ejemplo en Suiza, algo a lo que el CONI se negó. Que los italianos se negaran, al fin y al cabo ellos ya la habían hecho, tiene un pase, pero es inexplicable que el TAS no obligase a las partes a repetirla cuando su coste no es elevado y, como decía al principio, es la clave del proceso. Puesto que el juez Serrano, el de la Operación Puerto, y la mismísima Audiencia Provincial de Madrid, ya han dicho que nadie puede disponer de las pruebas, ¿tanto costaría confrontar el ADN de Valverde con la muestra que se llevaron los italianos, legal o ilegalmente, que eso ahora es lo de menos, del laboratorio de Barcelona?En vez de eso, tanto en la primera vista, la de enero, como en la segunda, la de la semana pasada, hemos tenido pruebas que nadie sabe a ciencia cierta hasta qué punto son válidas, hemos tenido mil testimonios distintos, a favor y en contra, hemos tenido distintas interpretaciones de la ley..., pero en mi opinión sigue faltando lo esencial: saber con exactitud, sin lugar a dudas, si el plasma de la bolsa 18 de la Operación Puerto es de Valverde. Si, como dicen los italianos, es suyo, una sanción sería lo más lógico, pero si no... Por desgracia, sin embargo, todo parece indicar que Valverde ha sido juzgado y casi sentenciado sin pruebas suficientes, porque lo que hay no pasan de ser meros indicios.Como explicaba al principio, el fallo del primer juicio del TAS -el del segundo no se conocerá antes de un mes- es mortal para Valverde. Distintos abogados españoles -he consultado cuatro- lo consideran aberrante, porque jurídicamente, coinciden, no se sostiene. "Es como si la decisión la tuvieran tomada de antemano y a lo único que se han limitado después es a argumentarla", reconoce alguno. "Es la muestra más evidente de que el TAS no es un órgano independiente, sino muy dependiente", dice otro. "Flaco favor han hecho con este fallo a la reputación y el prestigio del TAS", añade un tercero. Tengan o no razón, lo cierto es que el auto es favorable en todo, absolutamente en todo, a las tesis del CONI, que hasta el momento y salvo que el Tribunal Federal Suizo diga lo contrario -los abogados de Valverde recurrieron de antemano la composición del Jurado, ya que uno de los árbitros, el alemán Ulrich Haas, había trabajado estrechamente con la WADA, que era parte implicada en la causa-, está ganando por goleada. Habiendo un fallo previo como éste, me extrañaría que el Jurado del segundo juicio del TAS dijera lo contrario, luego...Sólo el Tribunal Federal Suizo podría cambiar las cosas. Primero si entendiera que Ulrich Haas nunca debió formar parte del Jurado, lo que dejaría sin efecto el fallo (menudo escándalo sería); después, si Valverde y sus abogados decidieran recurrir también el veredicto. No obstante, según me cuentan, sólo en una ocasión el Tribunal Federal Suizo ha revocado una sentencia del TAS, luego tampoco este camino parece fácil. Ahora mismo, sin embargo, es la única esperanza que le queda a Alejandro, ya que para recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos en la creencia de que se han vulnerado sus derechos, se necesita antes una decisión de los jueces helvéticos.Valverde, mientras tanto, sigue entrenándose, intentando, cada vez con menos éxito, aislarse del mundanal ruido que amenaza con llevárselo por delante. Aunque prepara actualmente su participación en la Vuelta al País Vasco, su calvario empieza a ser tan duro que, a veces, en los momentos bajos, casi desea que le sancionen aunque se sienta inocente, porque no acaba de ver luz al final del túnel. Además, piensa que, aunque le sancionen, "volveré y seguiré ganando". A la espera de que se pronuncie por segunda vez el TAS, la UCI tiene la palabra, ya que podría extender la sanción del CONI a nivel mundial.Las informaciones que anunciaban que, para librarse, había culpado a Ángel Vicioso, su ex compañero y amigo, han sido la puntilla. La realidad, sin embargo, es otra bien distinta, ya que no fueron ni Alejandro ni sus abogados los que, en el primer juicio del TAS, apuntaron a la posibilidad de que el número 18 correspondiera a otro corredor, en este caso al maño, sino uno de los testigos, una persona que por su cargo en aquellos tiempos tenía la obligación de conocer al dedillo el dossier de la Operación Puerto. Cualquiera que tenga la investigación policial en su poder, y a estas alturas ya la tiene medio mundo, puede no obstante comprobar que el nombre de Vicioso se relaciona con la carpeta 18 en la documentación intervenida a Ignacio Labarta. Parece, no obstante, que carpeta 18 y bolsa 18 son o pueden ser cosas distintas, luego no es éste el camino a seguir, sino, insisto, el análisis de ADN, que es el único que puede determinar con fiabilidad si, por los motivos que fueran, la sangre de Valverde estaba en la trama de dopaje que se conoce como Operación Puerto.

lunes, 22 de marzo de 2010

LA SORPRESA PERMANENTE


La víspera, su hermano Antonio le envió un mensaje: "Me huelo que vas a ganar con una pierna". Y él le respondió: "Creo que tienes razón". Quizás este intercambio fuera la explicación de que al día siguiente, camino del castillo Sforzesco, Óscar Freire se diera un golpe en la frente: "Ay va, me he dejado una zapatilla en el hotel". Un compañero, Langeveld, volvió rápido a la habitación a recuperar la zapatilla y 300 kilómetros más lejos, siete horas más tarde, Freire usó las dos piernas para ganar la Milán-San Remo más dura de los últimos años, una carrera que respondió plenamente a su etiqueta de Mundial de primavera. Tres sanremos para Freire. Como Coppi, como De Vlaeminck.
En la meta, un periodista italiano le entrevistó. "Tercera sanremo, tercera sorpresa. ¿Cómo se las arregla para dar siempre la sorpresa?" La proposición tenía, en teoría, un tono admirativo, pero Freire, cántabro, 34 años, ya 11 desde su primer Mundial, cualquier cosa menos un ciclista desconocido o sorpresa, prefirió aferrarse a la textualidad: "¡Jopé, una sorpresa! Si yo era el único de los participantes que ya había ganado dos... Una sorpresa sería si nunca la hubiera ganado antes. ¡Espero que al ganar la cuarta nadie diga que es una sorpresa!".
Un día después, una fiesta en Niza, champaña para todo el equipo, entre medias, a Freire, recién llegado a su casa de Coldrerio (Suiza), al hogar que comparte con Laura, su mujer, y sus hijos, Marcos y Mateo, aún le produce dentera la palabra sorpresa, como si 11 años viéndola como apellido inevitable de sus victorias, grandes y pequeñas -65 en total, tres monumentos, tres Mundiales, una Gante-Wevelgem, un maillot verde del Tour también, entre ellas- no le hubieran vacunado. "Siempre sorpresa, siempre sorpresa... Sólo falta que algún día digan que he ganado de suerte", dice; "no es la primera sanremo, precisamente, ni tampoco mi primera victoria del año, que he ganado cuatro de los cinco sprints que he disputado...".
Nadie, salvo su familia, que para eso está, parecía creer en las posibilidades de un corredor que, cuando está en forma, posee una capacidad brutal de aceleración en los últimos metros, una pedalada mágica, única, una aguda comprensión de las claves de las carreras, la paciencia necesaria, un conocimiento innato de sus posibilidades -"cuando dice que va a ganar es muy difícil que no gane", dice Antonio, su hermano-, de su cuerpo. "Bueno, eso de que nadie creía que yo iba a estar ahí no es exacto", matiza Freire; "los compañeros, los rivales, Boonen, Petacchi, Bennati, sabían que yo estaba fuerte aunque no entrara en los sprints de la Tirreno. Entre ciclistas, vemos los detalles importantes ,y también los ven los que han corrido, mientras que desde fuera los periodistas sólo se fijan en los resultados anteriores".
Freire es, según las crónicas de su victoria, un ciclista invisible con apariciones fulgurantes y oportunistas. No tiene la grandeza, para los creadores de historias, de leyendas, de un Boonen, el rey de la Roubaix y Flandes que, víctima de un problema con la cocaína, regresa más fuerte que nunca para completar su palmarés en Italia; tampoco es de la casa, no es Petacchi y Pozzato, el sprinter y el atacante, los personajes con los que se pueden crear rivalidades, lucha de fidelidades; tampoco es un niño como lo fue Cavendish, como lo es Boasson Hagen, ciclistas muy jóvenes y, por tanto, muy atractivos.
Además, Freire estaba el año pasado cansado, melancólico, apuntando a su retirada. "2009 fue muy duro. Me caí en febrero en California y estuve toda la temporada fuera de punto", dice Freire, quien, además, se vio obligado a contemplar desde la primera fila, la de los derrotados, la irrupción de Cavendish, el sprinter llegado para hacer olvidar el pasado: "Sufrí mucho en el Tour, no tanto por la superioridad de Cavendish, sino porque su equipo arrasaba y no dejaba una oportunidad a nadie. Este año el Columbia no está igual y todo está más abierto. El año pasado, además, nadie se involucraba en mi equipo. Pero eso ha cambiado en éste. Se vio en Mallorca, donde me trabajaron muy bien hasta el final, y se vio en Andalucía y también en la primera parte de la sanremo".
Este invierno, el más duro de las últimas décadas, el invierno en el que, curiosamente, menos ha podido entrenarse, menos kilómetros ha realizado por culpa de la nieve que no se derretía en las afueras de Torrelavega -lo que contribuye a la leyenda que dice que él, como Contador, como Valverde, como todos los cracks, apenas necesita nada para estar en forma-, todo cambió en la cabeza de Freire. Recuperó la chispa, las ganas. Anunció que seguirá como mínimo un año más, hasta diciembre de 2011; que su cabeza se llenaba de nuevos objetivos: "Ahora voy al País Vasco y luego a las clásicas de las Ardenas. Creo en mis posibilidades en la Flecha y la Lieja... Luego, debutaré en el Giro. Del Tour ya hablaremos. Y también del Mundial...".

domingo, 21 de marzo de 2010

EL MAYOR TALENTO DEL CICLISMO MODERNO


Horas después de la tercera victoria del de Torrelavega en la ‘classicissima’ el valor de ésta incluso se incrementa. Y naturalmente el de un corredor que, como comentaba, más realista que dolido, a comienzos de la temporada, es más apreciado, valorado o conocido en Suiza que en España y que si se llamase Van Freiren…

Pero no es holandés o belga, sino español. Y se llama Freire aunque en el primer Mundial que ganó todos los medios extranjeros hablaron del desconocido español Gómez, por aquello del segundo apellido. Es cierto que aquí se le valora por el hecho de haber ganado tres Mundiales, lo que le supone estar en un olimpo de elegidos –junto a Eddy Merckx, Rik Van Steenbergen y Alfredo Binda- y ser el único que en activo de ellos que puede batirlo. Y con opciones más que reales este año en Australia. Pero Freire se queja de que no se aprecie ‘todo lo demás’ que tiene en su palmarés. Sin ir muy lejos, el maillot verde del Tour de Francia 2008 o estas tres victorias en la ‘primavera’, sumando un total de 73 victorias en los doce años que lleva como profesional.


Y pese a tener 34 años, nos encontramos con un ciclista entero, física y psicológicamente, que no ha perdido ni pizca de su ambición. Es cierto que las lesiones le maltrataron en los primeros años de su carrera, y que le impidieron tener un palmarés aún más amplio, pero precisamente por ello no está quemado ahora. Atrás quedó ya ese ‘malentendido’ de que se podría retirar al término del 2010. No es así: por lo menos seguirá otro años más, aunque al paso que va, con esa solvencia que demuestra en carrera, ¡podría estar en activo hasta los cuarenta!
Igualmente quiero destacar que Freire es un ciclista muy respetado en el pelotón internacional. Acostumbrados al estereotipo de hombre despistado –aunque dentro de la carretera se transforma- nos olvidamos de que el cántabro siempre se ha manifestado de forma inequívoca contra las injusticias del mundo del ciclismo. Hoy, vía Twitter, he visto felicitaciones de numerosos compañeros del pelotón. Desde el propio Lance Armstrong, siguiendo por Robbie McEwan, Simon Gerrans o Robert Hunter, que manifestaba a las claras: “Siempre he dicho que es probablemente el mayor talento del ciclismo moderno”. No le falta razón

miércoles, 17 de marzo de 2010

LA PRIMAVERA CICLISTA TIENE BUENA PINTA


Alberto Contador ha vuelto a ganar en Niza. Todos los ojos estaban puestos en él y en su equipo. Ha vuelto a demostrar que cuando la carretera se empina es el más fuerte. Pero la segunda etapa, la de los abanicos, ha dado que hablar. Sólo fueron 17 segundos, sí. No es el Tour, también es verdad. Pero no es la primera vez que Alberto queda cortado en un abanico, y muchos han querido ver ahí su debilidad. ¿Realmente cree Armstrong que le va a ganar un Tour en un abanico? Es verdad que puede hacerle daño, pero creo que a Alberto será difícil cogerle en una de esas en Julio. Por otro lado hay que hablar de su equipo. En los momentos claves no ha estado con él, tanto en los abanicos, como en Mende, como en el Col d`Eze. Yo creo que es un buen equipo, que al tener de líder a Contador, un serio aspirante a ganar todo lo que corre, va a ir haciendo que se una. Quizás no es el más potente, pero es verdad que es un equipo prácticamente nuevo, y que los ciclistas no han corrido mucho juntos. Yo creo que sin ser un Radio Shack, un Caisse d`Epargne o un Saxo Bank, es un equipo en el que Alberto puede confiar para ganar el Tour.
También quería hablar de Peter Sagan, el joven esloveno del Liquigas. La forma en la que ha ganado las dos etapas ha sido impresionante. Me ha recordado al Riccardo Ricco en la Tirreno del 2007, salvando las diferencias físicas entre uno y otro. Habrá que seguir a este joven corredor, que si sigue ganando con la facilidad que lo ha hecho en Paris Niza, y con la fuerza de días como el de Aix-en-Provence, puede ser un referente para los próximos años. Por el momento veamos qué puede hacer en las clásicas de primavera.
Alejandro Valverde. La transformación del murciano durante la última temporada ha sido muy importante de cara a las vueltas por etapas. La temporada pasada la empezaba como otros años, ganando dos etapas en Castilla y León, para ser luego noveno en la clasificación general. Pero fue acabar las clásicas (con un séptimo puesto en Flecha Valona como resultado más destacable) y el cambio fue notable. Después de un buen Tour de Romandia, ganó la Volta a Catalunya, con una victoria de etapa. A partir de aquí, las victorias de etapa brillan por su ausencia. Victoria en Dauphiné Libéré, victoria en la general de la Vuelta a Burgos, victoria en la Vuelta a España, y este año, victoria en el Tour del Mediterráneo y segundo en Paris Niza. El cambio es evidente. De un ciclista con victorias de etapa en carreras de una semana, a un ciclista que no gana etapas, pero esta en todas rondando los primeros puestos para ganar la general. Ahorrando las fuerzas que antes gastaba para ganar las etapas con esas exhibiciones como en la del Tour en la que comenzó de líder. No sé si esto va a mermar sus posibilidades en las grandes clásicas como Amstel, Flecha o Lieja. Lo que áclaro es que Valverde se está dosificando, y gracias al gran trabajo de su equipo en cada carrera en la que compiten, es favorito en todo lo que corre. Me parece significativo que en una Paris Niza en la que se ha hecho especial hincapié en lo bien que ha ganado Contador, en lo fuerte que está, Valverde se haya quedado a solo 10 segundos del de Pinto. No sé si se puede hablar de un favorito para el Tour estando gente como Alberto, Andy Schleck…pero Alejandro ha cambiado, y yo creo que este año puede ser su año, con un equipo potente como el que tiene, y sin aparecer como gran favorito, seguro que aprovecha bien sus momentos.
Xavi Tondo, qué bien le ha venido el cambio de equipo. Con Cervelo va a poder disputar las grandes carreras del calendario, va a poder mostrar lo buen ciclista que es. El año pasado ya en el Andalucía dio un salto a mejores carreras (ojo que en Portugal malas no son, hablo sobre todo de la Vuelta), y este año puede ser el de su confirmación en el ciclismo más conocido por los aficionados.
Y no puedo dejar de hablar de Luis León Sánchez. Es un ciclista que cada año crece más. Lo demostró en Australia, y lo ha demostrado aquí. Es todavía joven y tiene margen de mejora, pero este año ya tiene que estar entre los mejores en el Tour. Lleva dos años ganando una etapa, ¿por qué no puede ser este año el del gran salto?
Pero ahora lo que viene es el gran espectáculo que son las clásicas. Empezaremos por Milán-San Remo, donde Freire querrá reverdecer laureles, y donde Cavendish intentara mostrar que el año pasado no fue casualidad. Tendremos luego el tridente del norte, con Flandes, Gante y el infierno del norte en Roubaix. Aquí Flecha que llega pletórico con su victoria en la antigua Omloop Het Volk, con su gran amor por estas clásicas (en especial Flandes) tengo el presentimiento de que nos va a dar alguna sorpresa. ¿Y estará Barredo en un equipo tan potente como Quick Step con Devolder, Boonen o Chavanel?
Creo que va a ser una gran primavera para nuestro ciclismo.

lunes, 15 de marzo de 2010

EL CICLISMO NECESITA SU MUNDIAL DE F1


Me da envidia el Mundial de Fórmula 1. Pero no por el dinero que mueve –que lógicamente importa-, sino principalmente porque todo el mundo conoce a los favoritos –y se identifica con uno o con varios-, cómo es cada equipo, cuál es la puntuación, cómo va el Campeonato y que tiene que hacer ‘su’ piloto para seguir con posibilidades. Es un evento fácil de seguir, con fechas regularmente distribuidas a lo largo del año, en casi una veintena de grandes premios.

En ciclismo lo más parecido que hemos tenido ha sido la Copa del Mundo que incomprensiblemente dejó de existir para dar paso al UCI Pro Tour, un conglomerado de pruebas de muy diversa índole. Siguiendo con el símil automovilístico, sería cómo si fusionásemos en el Coche Pro Tour, el Mundial de Fórmula 1 –las clásicas-, el de Rallyes –las pruebas por etapas- y los grandes raids tipo Dakar –las ‘grandes’-. Con los mismos protagonistas y máquinas. Y con una puntuación que nadie conoce ni sigue.

La única consecuencia positiva, para el ciclismo español, es que a final de año tenemos a un Alberto Contador o a un Alejandro Valverde como mejor ciclista, matemáticamente hablando, del año. ¿Pero sería alguien capaz de desgranar los ‘puntos’ de cada uno? O lo que es peor, ¿saber lo que tiene que hacer tal o cual ciclista para obtener este triunfo? Lo que interesa a cada uno de los corredores del mundo son las victorias ‘parciales’, del tipo que sean: unos irán por etapas, otros por generales, otros por determinadas clásicas, otros por clasificaciones menores… A todo el mundo le agrada, a posteriori, ser el mejor del mundo, pero todavía no he oído a nadie que se marque como objetivo, a priori, terminar el año como número uno.

Es una lástima porque la Copa del Mundo sí interesaba y con unos pequeños retoques podría revitalizarse y ser uno de los grandes ejes del calendario. . ¿No lo es en España la ahora llamada Copa de ciclismo en ruta? Luego estarían las ‘grandes’, la segunda referencia. O primera, según el tipo de ciclista. El resto de pruebas se ordenarían y clasificarían en función de estos eventos.
Tan sólo quedaría elegir el número de carreras que compondrían este Mundial de F1 ciclista. Porque las que deberían integrarlo están en la mente de todos, comenzando por los cinco ‘monumentos’, siguiendo por las pruebas que se han labrado un prestigio internacional, tipo Clásica San Sebastián o Eroica, y finalizando por otras pruebas nuevas, que tengan su propia imagen de marca, en aquellos ‘mercados’ que sean interesantes, ciclísticamente hablando, sobre todo Estados Unidos, Gran Bretaña o Australia. Todas ellas en fin de semana, e incluso con dos –en viernes y domingo, por ejemplo- en aquellos puntos en que se puedan agrupar, por ejemplo, Flecha Valona y Lieja-Bastoña-Lieja. Y siempre, sin la coincidencia de otras carreras de primer nivel.

Hace unos años un tal Javier Ares, que algo debe saber de esto, se manifestó en términos similares, incluso condenando a las ‘grandes’ a la desaparición, y le tildaron de loco. Yo no voy tan lejos, simplemente a racionalizar en un esquema de futuro lo que está en la mente de muchos.

UNA PIEDRA PRECIOSA EN LA RUTA DEL SOL


La Carrera del Sol, como es conocida popularmente la París - Niza, principal referente en esta primera parte de la temporada, de muchos de los favoritos al Tour de Francia. Entre los cuales se encuentra, el vigente campeón de la gran ronda francesa Alberto Contador, además del vencedor del año pasado Luis León Sánchez, su compañero Alejandro Valverde, el laureado olímpico Samuel Sánchez, Frank Schleck o el checo Roman Kreuziger entre otros. Al margen de estos nombres, en todas las ediciones de esta prestigiosa prueba, surgen corredores que hasta el momento suelen ser desconocidos incluso para el seguidor habitual, como los casos del galo Clément Lhotellerie en 2008, el compatriota de éste Jonathan Hivert o el belga Kevin Seeldrayers el pasado año. En cualquier caso nada que ver, con lo que está aconteciéndo la presente edición, con la irrupción fulgurante del corredor de Liquigas - Doimo, Peter Sagan, (Zilina 26/01/1990) que a sus poco más de 20 años y un mes, está eclipsando el buen hacer de los lideres que pugnan por la general, con su potentisimo tranco y versatilidad, que le han reportado un bagaje de dos victorias, culminadas de diferente manera pero refrendadas en el dominador común de la fuerza, conjugada con una gran inteligencia a la hora de leer las postrimerías de carrera.
Los precedentes a los dos triunfos del "querubín eslovaco", datan del conjugar gran experiencia, en las especialidades del ciclocross y en el campo del MTB, siendo referente y donde se fraguó un gran palmares, con victorias a nivel nacional, continental e internacional. Prueba de ello fue el doblete conseguido en 2008, al proclamarse campeón europeo y mundial junior, en la disciplina de mountainbike, éxitos más destacables del jovencisimo exbiker, además de finalizar 2º en los Campeonatos Mundiales de Treviso de ciclocross. Un año antes sería campeón nacional ruta en carretera de su categoría.2009 es el año, en que enrolado en el conjunto continental eslovaco Dukla Trencin - Merida, donde centra su carrera en la carretera, consiguiendo tres victorias, repartidas entre su Eslovaquia natal y la vecina Polonia, además de tener una destacada actuación en Italia, con motivo del Giro dei Friuli, haciendo 2 segundos puestos y un tercero, dando muestras de gran regularidad, que le auparían a concluir noveno en la general.
La versatilidad de la que ha hecho gala el joven Sagan esta semana, queda reflejada en sus dos triunfos, el gran prologo inaugural que realizó y el 2º puesto conseguido en la segunda jornada de esta París - Niza, siendo un golpe de riñón del galo Willian Bonnet (Bbox - Bouygues Telecom), el que le privara de jalonar su palmares, con la primera victoria en profesionales. Tan solo era un aviso de lo que estaba por llegar, ya que al día siguiente el sabor amargo de la derrota, se traduciría en dulce y delicioso chocolate, al imponerse en las calles de Aurillac, tras un angosto y tendido trazado que precedía al rectilíneo final. En el que Sagan saltaba del sexteto que conformaba con los hombres fuertes de la general, imponiendose al español Joaquim Rodriguez, (Katusha) y al campeón irlandés Nicolas Roche (Ag2r - La Mondiale) demostrando gran potencia fisica y una buena punta de velocidad.
Tras el recital de Alberto Contador en la subida a Mende, en la 4ª etapa, en la que se enfundó el maillot amarillo de líder de La Carrera de Sol, Sagan tenia guardado el tarro de las esencias para el día siguiente, con la llegada de la serpiente multicolor a la antigua capital de la Provenza francesa (Aix-en-Provence), en una jornada corta pero quebrada en lo orográfico. Con el cambio precedente de carretera hasta meta, estrecha con ligeras pendientes, y los respectivos lideres posicionandose en cabeza de carrera, nuestro protagonista colocaba a su jefe de filas Roman Kreuziger, en posiciones delanteras, quedándose él entre los tres, cuatro primeros corredores, que comandaban cabeza de pelotón. Fue dentro de los últimos 2 km. a meta, cuando Cristophe Le Mevel (Française des Jeux), saltaba del gran grupo en una curva a derechas en ligero ascenso, respondiendo a su vez de manera portentosa el maillot verde de la regularidad Peter Sagan, que rebasaba como una exhalación al veterano corredor francés, para no sin sufrimiento regular hasta linea de llegada, con una ligerisima ventaja sobre Mirco Lorenzetto (Lampre - Farnese Vini) y Alejandro Valverde (Caisse d´Epargne), lográndo así su segunda victoria en apenas dos días, confirmandosé como la gran revelación en lo que llevamos de temporada.
La irrupción de Sagan, hace que irremediablemente se ahonde en los ejemplos de precocidad del ciclismo contemporáneo, en los que a la edad temprana de neo-profesional, comenzaron a destacar. Entre dichos ejemplos nos encontramos con figuras actuales como Tom Boonen, que con tan sólo 21 años, concluía 3º en el Velódromo de Roubaix, tras su compatriota Johan Musseuw y el germano Steffen Wesemann, en 2002. Otro ilustre que despuntó en sus inicios en el campo profesional, fue Filippo Pozzato, igualmente con 21 años, militándo en filas de Fassa Bortolo, se adjudicaría etapa y general de la Tirreno - Adriático en 2003. Al año siguiente, el transalpino conseguiría una etapa del Tour de Francia (Châteaubriant - Saint-Brieuc), por delante de los españoles Iker Flores y Francisco Mancebo.El compañero de Pozzato en Fassa Bortolo, Fabian Cancellara, acabaría de consagrar lo apuntado en categorías inferiores, con tan solo 22 años de edad, al conseguir victorias en los prólogos de Romandía, Vuelta a Suiza y el inaugural del Tour de Francia, además de quedar 4º en la exigente París - Roubaix, esa misma temporada -2004-.Damiano Cunego, Frank Schleck o el más reciente y última sensación de infante precoz, Edvald Boasson Hagen, son también acreedores de mención, al demostrar todos ellos con apenas la veintena de edad, unos resultados que hacían y hacen albergar, lo que se esperaba y espera de ellos con mayor o menor acierto, pero sin duda alguna atesoran el talento temprano que les hacia destacar en categorías inferiores. En un segundo plano y de corte similar en cuanto a edad y despunte en neo-profesionales, están la figura de Gerald Ciolek alumno aventajado del denostado ciclismo alemán, el colombiano Rigoberto Uran, quien con 20 años y 5 meses se impondría en una etapa de la Vuelta a Suiza con final en alto. Los tulipanes y militantes en filas del conjunto Rabobank, Robert Gesink y Lars Boom, quien tan buenas sensaciones ha mostrado en el inicio de esta Paris- Niza, son también dignos de mención, al igual que el compañero de Sagan, Roman Kreuziger, en este singular apartado de alumnos aventajados.
Con la impronta arrogancia y vehemencia en carrera de joven impetuoso, Peter Sagan comienza a mostrarse al mundo. Por lo pronto en el seno de Liquigas, se muestran sorprendidos por las prestaciones del bisoño corredor eslovaco, como ha reconocido recientemente Mario Scirea, y al que la estructura italiana con sede en Brescia, quiere adoctrinar de la misma manera que lo están haciendo con sus otras dos perlas, Vincenzo Nibali y Roman Kreuziger, para definirle como ciclista.Sagan parece demostrar estar tocado por la varita mágica de los elegidos, demostrando talento innato, potencia, colocación, visión de carrera, cierta punta de velocidad, contrarelojear de manera solvente en distancias cortas, y se le atisba cierta facilidad para adaptarse a diversos terrenos, con solvencia y regularidad, todo ello no exento de clase, predeciendo un perfil de corredor completo.Un diamante por pulir, del que está por verse si seguirá en progresión ascendente, confirmando el toque divino de la exclusiva varita, o tan sólo sea uno más de los muchos, que tras asombrar con exhibiciones en carreras de alta alcurnia, se quede en el camino. De momento, el relente cristalino de la piedra preciosa en La Carrera del Sol, eclipsa a los favoritos.

viernes, 12 de marzo de 2010

UNA MILLA COLOR TURQUESA


El ciclismo español ha vuelto a escribir hoy una bella página para la historia de este deporte. Y lo ha hecho en un gran escenario, como es la París-Niza, la primera gran cita de la temporada en pruebas por etapas. Y lo ha hecho en la cuarta etapa, primera de alta montaña, de esta prestigiosa prueba francesa. Cuatro ciclistas de nuestro país: Contador, Valverde, Samuel Sánchez y Joaquín Rodríguez, han copado los cuatro primeros puestos de la etapa, y hasta cinco, añadiendo a los citados el nombre de Luis León Sánchez, están clasificados entre los diez primeros de la general; cuatro entre los cinco primeros.
El deporte español, en su conjunto, hace tiempo que es una potencia mundial; pero pocas disciplinas logran los registros que viene ofreciendo el ciclismo. Un deporte que, pese a la brillantez y calidad de sus practicantes, atraviesa en nuestro país una fuerte crisis a nivel de equipos y organizaciones.
Uno de los motivos de esta incomprensible situación es sin duda la falta de cobertura televisiva. Mientras el fútbol, la fórmula 1, el motociclismo o el tenis gozan del favor de las grandes cadenas, al ciclismo se le relega cada día más a los canales temáticos. Y a veces ni a eso. Y si esto sucede cuando se cuenta con la mejor generación que se recuerda, asusta pensar qué puede pasar cuando falle el relevo generacional.
Es el caso de algunas comunidades autónomas es el caso de Murcia que deciden dejar de lado el deporte de las dos ruedas dando al traste con un equipo profesional con las consecuencias negativas en materia de cantera que eso ocasiona y dar patrocinio a equipos de formula 1 con el ridículo lema NO TYPICAL y tanto que no típica vaya pajarazo no van a pegar con el dichoso cochecito o sino al tiempo!!!, lamentable ya este año hasta nos han dejado sin ningún tipo de retransmisión de la vuelta a la región en el canal regional teniendo que asistir al tan afamado Internet a las paginas especializadas para conocer cualquier dato de la misma, al final van a conseguir acabar con esta mítica vuelta histórica donde las haya, lamentable!!! Haber si de una vez por todas hay seriedad en esta región y repartimos mas equitativamente lo que corresponde a cada disciplina deportiva que por pequeña que sea merece todo el respeto del mundo.
Entrando en materia ciclista Murcia es una de esas comunidades donde hay una de las mejores canteras de chavales ciclistas de España (Guardiola, teruel, Aitor bernal,calatayud,fructuoso, etc..) con una calidad no aprovechada por nadie en la que año tras año se va secando porque no la cuidan como se merece y deja a un lado a gran cantidad de chavales con una calidad innata para esto del pedal que se quedan sin oportunidades y asqueados de la situación deciden marchar hacia otras comunidades autónomas a buscar esa ansiada oportunidad, otros deciden colgar la bici aburridos de tanto esfuerzo para nada.
Como dicen los entendidos lo únicos que mantienen este espíritu ciclista y cuidan con mimo la cantera son los vascos allí nunca habrá crisis en el ciclismo porque allí es visto como un deporte regional tradicional y habrá años con mejores chavales y con peores pero año tras año van mimando y cuidando la manera de hacer las cosas y los frutos tarde o temprano salen a la luz, y así siempre será el lugar donde mejor se trata al mundo del pedal, a nivel informativo, de equipos, y ojo es el único equipo con patrocinio español eso si una empresa tradicional del país vasco. Lo dicho tratan a este gran deporte como se merece con un poco de respeto y rigor que envidia ojala muchos imitaran la formula para que esta gran hornada de estrellas que tenemos no termine secándose y quedando en el olvido.




miércoles, 10 de marzo de 2010

¿INVISIBLES?


Aunque muchos de vosotros me ganáis sobradamente en experiencia sobre la bici, hace ya unos cuantos años que ruedo por las carreteras.Durante estos años, como también os habrá pasado a vosotros, he tenido mis sustos más o menos importantes sobre la bicicleta por culpa de algún conductor. He reflexionado mucho sobre las causas de esos sustos. Independientemente de la frecuencia y gravedad, lo que más me llama la atención es que el perfil del conductor con el que entramos en conflicto es muy variado: desde el chaval joven que va por ahí arrasando por la carretera con su "buga", hasta el conductor profesional ("furgoneteros", camioneros, taxistas...), pasando por mujeres y hombres de todas las edades...La conclusión a la que he llegado es que la gran mayoría de los accidentes o percances que sufrimos sobre la bici se debe a que los conductores sencillamente no nos ven. No quiero decir que no nos vean físicamente; sino que, a pesar de vernos, no somos lo suficientemente importantes (mejor diría contundentes) como para obligar al conductor a aminorar la marcha o desplazarse ese metro y medio a la izquierda al que le obliga el código de circulación cuando adelantan a un ciclista.

Para quien piense que me estoy metiendo en un galimatías pondré un ejemplo. Somos tan visibles para los conductores como los múltiples conejos, ratas o perros que vemos muertos en las cunetas de las carreteras. No creo que esté exagerando... nadie quiere atropellar a esos animales, pero muchas veces pensamos que su existencia no merece un volantazo que podría tener malas consecuencias. Con los ciclistas paso algo parecido; nadie nos quiere hacer daño pero podemos molestar su marcha, su velocidad constante, su trazada... sencillamente para un vehículo no representamos ningún peligro. ¡En resumen, no nos ven, no tienen por qué vernos!Recuerdo perfectamente que una vez, en plena rampa del 10 por ciento, tuve que poner pie a tierra porque una señora quiso salir de su garaje justo en el momento en que iba a pasar en bici. Estaba tan encima de su coche que no pude desviarme y me tuve que parar. Y no es que la señora no hubiese mirado, lo había hecho en sendas ocasiones y a ambos lados y seguro que me vio; pero imagino que al no detectar ni coches, ni camiones, ni motocicletas su mecanismo mental le dijo "adelante, no hay peligro"... me acababa de convertir en uno de esos ratoncillos que no tienen por qué impedir la marcha de un vehículo; en un ser invisible de facto.Conozco gente que se quejan mucho de que los ciclistas son imprudentes, que no circulan suficientemente por la derecha, de que van en grupos muy numerosos, de que se saltan los semáforos en rojo y los stops... Sé que eso es cierto, pero no entiendo a dónde se quiere llegar con tal argumentación: ¿qué pasa, que si no se circula por la derecha se puede atropellar al ciclista? Este absurdo lo combato preguntando a mi quejoso interlocutor si es que él, como peatón, jamás ha cruzado una calle con el semáforo en rojo o si nunca ha cruzado una carretera por donde no estaba el paso de cebra y si es que piensa que esa temeridad le da derecho a alguien a poderle atropellar o a darle un "sustillo" a ver si escarmienta. En estos casos, al parecer, los peatones, son más visibles (en este caso, menos odiados) que los ciclistas.Habrá que pensar en alguna manera de solucionar este problema de la invisibilidad... aunque mucho me temo que no bastará con agrandar los reflectantes.

lunes, 8 de marzo de 2010

CARA A CARA CON LA LEYENDA


Hola amiguetes a continuación he subido una suculenta e interesante entrevista que mi idolo del periodismo ciclista : Carlos Arribas le ha realizado al mito del ciclismo Lance Armstrong a su paso por murcia y como el americano no deja conceder muchas entrevistas para periodistas solo a los muy especializados he visto conveniente publicarla porque no tiene desperdicio aquí os la dejo que la disfruteis.
Jubilados británicos que pasan el invierno entre gin tonics y palos de golf. Olor a purines en la puerta, olor que une los orígenes agrícolas de la zona, el campo de golf que rodea la urbanización surgida en medio de la nada. En la habitación de Lance Armstrong (Tejas, Estados Unidos; 1971), el viernes por la noche, ropa desordenada sobre una cheslón, una tele encendida al fondo. El ciclista, pocas horas después de haber "sufrido como un perro" en la subida a Collado Bermejo, momento fuerte de la Vuelta a Murcia, relajado. "Sí, sí, me cansé bastante, pero ahora me siento bien. Wiggins [Bradley, corredor británico] está fuerte. Le veo fino", comenta. ¿Más que el año pasado? "No le vi en marzo del año pasado, pero ahora ya está delgado. Ha perdido culo", explica.
Pregunta. Leyendo su twitter, en el que cuenta su vida, uno no puede evitar admirar su capacidad para dar con la expresión precisa, su chispa... Más parece un hombre de la agencia de Madmen que un ciclista.
Respuesta. Lo único que he hecho en mi vida ha sido ser ciclista, pero creo que hay una gran diferencia entre los demás y yo. Y es que yo llevo haciéndolo casi 20 años. Y he conocido muchísimos sitios. El ciclismo me ha llevado a todos los continentes. Y se aprende de todo, a valorar a otras gentes, otras culturas, otras lenguas, arte...
P. ¿Pero no piensa que la diferencia con los demás está en su mirada, no en lo que mira?
R. Sí, claro, es diferente a la de los demás. Sobre todo, por mi experiencia vital. Soy un superviviente del cáncer. Haber pasado por ese periodo lo cambia todo. Eso les pasaría a todos. Cualquier ciclista que lo sufra ahora, dentro de 10 años, será otro; cualquier persona de la calle... Es un cambio de perspectiva inevitable.
P. Cualquier cosa que usted toca la convierte en tendencia. Las pulseritas amarillas, que todo el mundo imita de todos los colores; su twitter tiene ya dos millones y medio de seguidores...
R. Lo más importante es ser auténtico. Soy el único que twitea mis twitters. A todos los demás se los hacen sus agentes, sus jefes de prensa, sus hermanas... Y es importante que cuando alguien lea algo sepa que es tuyo.
P. También parece admirable su capacidad para dedicar su energía a cosas diferentes: arte, ciencia, tecnología, obras sociales... Tan distintas como sus gustos musicales, de Miles Davis a punks californianos. Parece que necesita estar todo el día en acción. ¿Cómo lo puede hacer?
R. Creo que siempre ha habido una percepción equivocada porque antes la gente me veía como un ciclista, un deportista que se entrenaba 24 horas al día, plenamente concentrado, sin personalidad, sin intereses, sin amigos... Eso no era verdad. Me interesaba por muchas cosas. Y ahora hago las cosas que me gustan. En cuestiones de arte soy un autodidacta. No he tenido educación, pero, cuando veo una pieza de arte, ella me dice sí o no. Me he hecho unas cuantas casas en muchos sitios y en todas me he esforzado por colgar arte en las paredes. El arquitecto diseña la casa, pero las paredes son cosa del propietario y en ellas se refleja su personalidad. Empecé a coleccionar arte hace unos 10 años. Poco a poco, silenciosamente.
P. ¿Esa conciencia de su propia diferencia le lleva a sentirse superior al resto del pelotón?
R. No; ahora, no. Irónicamente, creo que ahora me siento más cercano a los compañeros. Tomemos el pelotón del Tour, 200 tipos. Ahora hablo más con ellos que antes. Antes sólo hablaba con ocho muchachos, mis muchachos. Ni una palabra a los demás. Y les decía a esos ocho que no hablaran con nadie durante las tres semanas del Tour. Después, que hablaran con quien quisieran. Así que mi conexión con el ciclismo es mejor ahora que antes. De una manera extraña, ahora me preocupa más el deporte.
P. ¿Se preocupaba antes más por usted mismo que por su deporte?
R. Yo no diría eso. No me preocupaba de los otros equipos, pero me preocupaba del mío. Y me preocupaba por Chechu Rubiera lo mismo que por mí. Y los rivales ni existían. Pero en aquellos años era un trabajo y ahora es más una pasión, una diversión. Hay una motivación diferente.
P. ¿Cree que en el pelotón se le respeta o más bien se le teme? Eso es lo que pasaba con Tiger Woods en el golf...
R. Son deportes diferentes. El golf es un deporte individual. El ciclismo, no. El ciclismo es un deporte de equipo y, cuando uno no tiene equipo, tiene que buscarlo en el pelotón. Y un día puede que lo encuentre, pero... ¿al siguiente? Es imposible que yo sepa lo que sienten los demás. Sé que en los viejos tiempos me temían y quizá ahora me respetan. Hay jóvenes ciclistas que se me acercan y me piden, muy educados, si pueden hacerse una foto conmigo. Me hacen sentir viejo.
P. Usted es viejo.
R. Soy viejo, 38 años, pero no tan viejo como Cuesta [Íñigo, de 40 años].
P. A usted le temían. Incluso había corredores que le odiaban por su soberbia, sus maneras de dictador, su mirada desaprobadora... Ahora parece domesticado...
R. Esa mirada... Y todavía la tengo. En la vida hay gente apasionada, comprometida, intensa..., y gente pasiva. Yo soy como los primeros. Incluso las líneas en el entrecejo, las que marcan mi mirada, son ya permanentes. En los viejos tiempos podía mirar así a algún periodista loco como un ataque, pero también miro así a mis hijos en casa cuando no me obedecen. La misma mirada intensa. Y se la doy tanto a unos que no me gustan como a mis hijos, a los que quiero más que a mí mismo. Es la misma personalidad, la misma intensidad.
P. ¿Tiene algo que ver su pose con la manera como la prensa de Estados Unidos trata a sus héroes deportivos? ¿Es diferente a la europea?
R. Definitivamente, ahora no, pero quizá un poco en el pasado. Mi gran objetivo ahora es ser invisible, no ser visto nunca. Es un compromiso conmigo mismo. Cuando dejé el ciclismo, hice la vida de un joven, con amigos, mujeres, fiestas... Es diferente cómo se cubre el deporte en los medios y cómo la vida social, el estilo Hollywood. No me gustó cómo lo hacían. Alcancé un punto en el que me dije: "Nadie necesita verme". Sólo me dejo ver en las competiciones deportivas o en los actos que organiza Livestrong, la fundación contra el cáncer. Los medios son diferentes ahora.
P. ¿Es una prensa más crítica?
R. Más competitiva, pero desde su propio punto de vista, y más volátil, cambiable. Ahora los ciclos de atención de los lectores o espectadores son mucho más cortos. Hace 50 años sólo había tres canales de televisión en Estados Unidos y una radio, un periódico... Después llegó la televisión por cable, 50 canales. Y empezó la competencia. Y luego Internet, blogs, twitters, videocámaras en todas partes, micrófonos... Finalmente, todo el mundo se siente periodista, es un periodista. Y los deportistas cometemos errores. Antes mencionó a Tiger. Decimos cosas que no debemos e inevitablemente siempre se organiza un carnaval. La moraleja es que ya no hay dónde esconderse. Hay que buscar más hondo y más hondo. Querría imitar a algunos pocos que lo consiguen. A Federer... ¿Alguien le ve fuera de los torneos? A Tiger se le acabaron los escondites. Pero a Johnny Depp nadie le ve nunca. Es como un fantasma. No entiendo a la gente que quiere salir en todas las fotos.
P. ¿Se considera un héroe deportivo? ¿Es posible ahora ser ciclista y ser considerado un héroe?
R. Es diferente en Europa y en Estados Unidos. Aquí dicen de los ciclistas burradas: que si están locos, cualquier cosa... En mi país es distinto. Es un deporte más minoritario. No más del uno o el dos por ciento de la gente lo sigue. A mí la gente me asocia en el mundo con el cáncer. Es bueno.
P. Usted ha criticado la forma en que en España se mitifica a los héroes deportivos. ¿Se siente, quizá, celoso por la manera como se trata a Alberto Contador?
R. No. No soy español. No puedo esperar que me traten igual. La cobertura del Tour en España fue muy pro-Alberto y en Estados Unidos muy pro-Armstrong. Es lógico.
P. ¿Es muy importante para usted ganar por octava vez el Tour?
R. No es esencial. No lo necesito especialmente. Sólo, como una recompensa a un trabajo duro. Pero, honradamente, no hay diferencia entre ganar siete u ocho. El próximo Tour será una gran historia: la rivalidad con Alberto, lo que sucedió el año pasado... Eso será bueno para el Tour, pero no cambiará mi vida ganarlo o no, ni la vida de mis hijos.
P. Pero una persona tan competitiva como usted necesita ganar siempre.
R. Sí. Pero incluso así... Lo primero de todo es que será muy difícil. Tengo 38 años. Alberto, 27 y mejora cada año. Yo lo veo, la gente lo ve, Alberto lo ve... La respuesta no está a mi favor...
P. Pero usted ha sido capaz de ganar contra cualquier expectativa. En todo: en la vida, en el Tour...
R. Sí. Nadie tiene el trofeo desde la salida. Se va a la carrera y se ve quién es el mejor.
P. Volviendo a las miradas, la imagen que resumió el pasado Tour fue la del podio de París, la forma en que usted miraba a Contador cuando recibía la copa. ¿Qué sentía en ese momento?
R. Pero no había emociones fuertes. Mi recuerdo de aquel tercer puesto, de todos los podios, es de alivio, de sentirme agradecido porque todo se acabó y de tener ganas de volver a casa. Son tres semanas de tanto agobio, tanta presión... Alberto fue el mejor del Tour y, para mí, fue lógico y honorable que él estuviera en lo más alto. Yo no estaba celoso, enfadado, amargado... Nada de eso. Él fue el mejor.
P. ¿Cree que su presencia en el podio dos escalones más abajo hizo más grande la victoria de Contador?
R. Quizá, desde su punto de vista o desde el de los medios, sí que le gustó que yo estuviera allí, debajo. Desde mi punto de vista, fue bueno para mí estar ahí. Cantidad de gente, incluidos algunos amigos míos como Eddy Merckx, no pensaban que sería capaz de terminar siquiera entre los 10 primeros. Y hay una gran diferencia entre terminar cuarto y terminar tercero. Por primera vez me di cuenta. Me alegró muchísimo no ser cuarto.
P. En 2009 usted dijo que en 2010 sería más fuerte. ¿Está más fuerte que entonces?
R. Sí. Diferente, al menos. Me siento más ciclista. Quizá tuviera más fuerza bruta el año pasado, pero en éste tengo más fuerza ciclista, que no es lo mismo. Soy mejor ciclista ahora. Hasta me puedo sentir cómodo en el pelotón. El año pasado, al principio, iba nervioso, con miedo, a cola... Por eso me caí en Palencia.
P. Entonces, ¿será más frustrante no ganar el Tour?
R. Sólo me sentiría frustrado si cometiera un error. Si estoy al máximo de mi nivel de 38 años, no cometo errores, no sufro caídas, no me enfermo o pincho en un mal momento, no tengo mala suerte y gana el mejor, no me podré lamentar.
P. Contador le gana subiendo y en las contrarreloj, así que su único terreno favorable pueden ser las emboscadas en llano, el pavés, los abanicos, un equipo más fuerte...
R. El ciclismo está hecho de ello. Y muchas veces hemos tomado muy buenas decisiones en ese sentido. Recuerde mi primer Tour, el pasaje de Gois y Zülle: si él no se hubiera caído y perdido siete minutos, habría sido un Tour completamente diferente. Y era el primer Tour, lo que significa que los otros Tours habrían sido diferentes. Tácticamente, hay que ser muy inteligente.
P. El que en el Tour pasado Contador y usted compartieran equipo, el más fuerte de la carrera, facilitó mucho la victoria de Contador. En la contrarreloj por equipos se deshicieron de todos los demás y luego sólo quedaba la cuestión interna. ¿Cómo entiende que Contador se quejara después del equipo?
R. Es mejor no comentarlo. Como dije antes, éste es un deporte de equipo. Y siempre he creído que hay que valorar a los compañeros. Tú eres el jefe, tienes el maillot amarillo, estás en lo más alto del podio, tienes millones de dólares... Y ellos no tienen nada. Lo más honorable es, pues, respetarlos. Si no, no tendrás nada. Siempre lo he hecho con mis chicos: darles más dinero, respetarlos... Tenemos que ser una familia. Y no es una crítica a Alberto. Es como creo que deben hacerse las cosas.
P. ¿No es posible que sucediera algo, que no sabemos, que hiciera reaccionar así a Contador?
R. Alberto es una persona nerviosa, lo que no es malo. Yo también lo soy. Siempre pensamos que tenemos que hacer más, trabajar más, ser mejores. Todos los grandes campeones son así, todos tienen un pelín de inseguridad en la vida y tienen que compensarlo. Dije nervioso, pero que no se entienda como algo negativo. Y el resto no creo que sea Alberto, sino la gente que le rodea. Si pregunta a cualquiera que haya estado en contacto con ese grupo... Es la primera vez que se lo digo: hay que ser cuidadoso con el entorno. Pero, de todas formas, me lo pasé bien durante el Tour.
P. ¿Su entorno son las personas que dice que sólo saben decir "sí, señor", a todo lo que dice?
R. De nuevo le prevengo. Voy a hacer una declaración en abstracto, no una dirigida concretamente a Alberto y su gente. El papel y la responsabilidad de esa gente es decir "sí" muchas veces, pero, cuando llegar el momento de decir "no", tienen que saber decirlo y esa persona tiene que escuchar al "no". Un montón de gente me dice a mí que "sí" a todo...
P. ¿Johan [Bruyneel, su director] le ha dicho alguna vez "no"?
R. Johan dice "sí" todo el tiempo, todo el tiempo, pero algunas veces dice: "Lance, no". Y yo digo "OK" y me siento mejor después. Cuando alguien en quien has confiado para construir tu carrera dice "no" después de muchos "síes", la única respuesta es "no".
P. ¿Cree, entonces, que Contador debe madurar?
R. Alberto no es estúpido. Es una persona inteligente. Seguirá creciendo y adquiriendo experiencia en todo.
P. ¿Piensa hablar antes del Tour con él?
R. No es necesario.
P. ¿Hay alguna novedad respecto a la investigación de la policía francesa sobre los residuos sanitarios de su equipo en el pasado Tour?
R. Nunca he recibido personalmente noticias de los franceses. Sólo sé lo que leo en los medios, en Internet. Si sólo leyera el periódico local y el New York Times, que es el de referencia, nunca me habría enterado de esta historia porque nunca ha salido allí. No tengo información, no.
P. ¿Cree que, según nos acerquemos al Tour, surgirán más informaciones de ese tipo, dudosas?
R. No tienen ningún interés en sacar historias de éstas un 5 de marzo. No es una gran historia. Pero el 5 de julio es una gran historia, grandes titulares..., así que habrá que esperar. Estamos en el medio de una lucha política entre la agencia francesa antidopaje y la Unión Ciclista Internacional y seguro que a los ciclistas nos utilizan.
P. ¿Estas cosas le hacen pensar que el futuro del ciclismo es anglosajón? En España, por ejemplo, donde hay los mejores corredores del mundo, no hay patrocinadores que quieran construir un gran equipo.
R. Creo que se mezclan dos asuntos. Estamos recuperándonos de toda la miseria de las historias de dopaje y estamos sufriendo una grave crisis económica. Mire España: cinco millones de parados en este país. Creo que una empresa tendría muy difícil justificar un gasto de 10 millones de euros en un equipo ciclista.
P. Pero en Estados Unidos o Reino Unido están saliendo grandes equipos. ¿La mirada que tienen sobre el ciclismo es muy diferente a la de la vieja Europa, a la de los países tradicionales?
R. En esos países hay sobre todo más ciclistas aficionados, gente a la que le gusta salir en bicicleta. Aunque, y no peco de vanidoso, son los hechos, mi historia en el Tour y en la vida, lo que ha multiplicado la afición en mi país. La gente se ha visto expuesta al ciclismo. Lo mismo pasó con el golf y Tiger Woods o con la natación y Michael Phelps. En Estados Unidos la gente sale en bicicleta para hacer ejercicio, no para emular a los ciclistas de la Vuelta a Murcia o la París-Roubaix. Salen en bicicleta por salud. En España, Francia, Italia..., los cicloturistas entienden el deporte. El verdadero drama del ciclismo es la falta de unidad entre organizadores, ciclistas, patrocinadores, periodistas... No se trata de estar siempre de acuerdo en todo, pero mejor la mayor parte del tiempo. Esto es lo que pasa en España. Estoy en la Vuelta a Murcia y no hay equipos españoles por una diferencia de un par de miles de euros. Hay gente, como Alberto, que puede ayudar a que el ciclismo resucite. Y el ciclismo a veces olvida que, sin esas personalidades, no iría a ninguna parte.
P. ¿Seguirá usted en 2011?
R. Lo decidiré tras el Tour. Lo más duro es mi familia. Los echo mucho de menos. No es lo mismo los niños que ya han crecido que el que tuve el año pasado. Miro a los niños de modo diferente. Max me ha dado una perspectiva distinta sobre los niños y la paternidad.

lunes, 1 de marzo de 2010

¿Y TU EN QUE PIENSAS?


Sí, es sin duda una buena pregunta. ¿No te parece? ¿En qué piensas mientras pedaleas? Horas y más horas encima de la bici, tendrás tiempo de pensar, ¿no?
¿O es que acaso los ciclistas (profesionales y aficionados) no pensamos? Sí, por supuesto que sí. Seguro que tú piensas mucho encima de tu flaca. Seguro que alguien te lo ha preguntado alguna vez. El ciclismo es un deporte extraño, puedes pasarte horas pedaleando con otros compañeros, pero en el fondo casi siempre vas solo, pensando y pensando... pero, ¿en qué?Si otros deportes –más colectivos, más sociables–, te permiten desconectar y requieren un alto nivel de concentración; el ciclismo por buena o mala suerte permite reflexiones constantes. Pese a ello, muchos de nosotros encontramos una vía de escape a esto de la pedalada constante. A lo mejor es precisamente esa explosiva mezcla de preocupaciones y sufrimiento físico sobre la bicicleta lo que nos permite un cierto desahogo mental.Pero, volvamos a la pregunta inicial. ¿En qué piensas mientras pedaleas? Tienes frente a ti un recorrido de más de tres horas de bicicleta y hoy sales solo –como casi todos los días que puedes permitírtelo entre semana– y tienes que elegir temas. ¿Quizás piensas en cómo contentar a esa novia que no acaba de comprender cómo puedes pasarte tantas horas en bici por ahí, en lugar de quedarte con ella en casa, especialmente los sábados? ¿Quizás es ella quien muchas veces y con insistencia te pregunta precisamente eso: “En qué piensas mientras pedaleas”? ¿Quizás es el trabajo lo que te preocupa y le vas dando vueltas y vueltas de bielas a tu futuro profesional y a cómo emprender un nuevo camino? ¿Quizás algún familiar enfermo ocupa tu cabeza o quizás no... para qué ponernos dramáticos, es mucho mejor darle vueltas a si cuando llegue la hora de la cena pedirás pizza cuatro estaciones o margarita, no te parece? ¿Quizás sencillamente te preguntas cómo rayos has elegido este duro recorrido si aún no estás suficientemente preparado? ¿Quizás mientras pasan los kilómetros es el mejor momento para pensar en un cambio de bici y vas repasando mentalmente modelos y catálogos, descartas unos, escoges otros...Todo es susceptible de venirnos a la cabeza mientras pedaleamos y quizás lo importante es que esos pensamientos no se queden tan solo en nuestra mente, sino que seamos capaces de exteriorizarlos cuando llegue la ocasión. Pero, ándate con ojo y, entre tanto pensamiento, acuérdate de echarle un vistazo de vez en cuando al paisaje y al entorno, seguro que ahí podrás encontrar una buena fuente de inspiración para futuras pedaladas mentales.